Fundamentación y Objetivo
Fundamentación
Teniendo en cuenta los datos obtenidos en encuestas a docentes durante el 2022 y en contra del prejuicio sobre la resistencia a los cambios o el temor a lo desconocido por parte del cuerpo docente consultado1, más de la mitad de los encuestados (56,3%) dictaron clases híbridas en el primer semestre. De este grupo, casi un 30% desarrolló todas sus clases con esta modalidad. En la misma dirección, en la consulta a estudiantes2, más del 70% participaron de por lo menos una clase híbrida, siendo mayor la proporción quienes cursaron más de 10 clases de este tipo. Sólo un 13,5% no cursó materia alguna con clase híbrida y otro 5% no asistió a las materias que sí tuvieron. Por lo tanto, la amplia mayoría tuvo la oportunidad de participar y elegir clases con modalidad híbrida.
Por lo general, las clases híbridas tuvieron un formato pedagógico predominantemente expositivo, reproduciendo cierta lógica academicista de la clase magistral característica en educación superior. No obstante, también fue posible observar que la exposición fue acompañada de otras estrategias, siendo las más típicas el trabajo con casos y la resolución de ejercicios en grupos o por cuestionarios. Esta observación se relaciona con la respuesta acerca de la selección de contenidos: el 70% de los docentes respondió negativamente respecto de realizar adecuaciones al contenido de su materia para las clases híbridas. Además, entre los aspectos más complejos de atender de las clases híbridas, en primer lugar aparece el manejo de los recursos técnicos, en segundo lugar, atender ambos grupos en forma simultánea y en tercer lugar, el diseño didáctico.Por lo general, las clases híbridas tuvieron un formato pedagógico predominantemente expositivo, reproduciendo cierta lógica academicista de la clase magistral característica en educación superior. No obstante, también fue posible observar que la exposición fue acompañada de otras estrategias, siendo las más típicas el trabajo con casos y la resolución de ejercicios en grupos o por cuestionarios. Esta observación se relaciona con la respuesta acerca de la selección de contenidos: el 70% de los docentes respondió negativamente respecto de realizar adecuaciones al contenido de su materia para las clases híbridas. Además, entre los aspectos más complejos de atender de las clases híbridas, en primer lugar aparece el manejo de los recursos técnicos, en segundo lugar, atender ambos grupos en forma simultánea y en tercer lugar, el diseño didáctico.
Sumado a ello, se observa entre gran parte de las/os encuestadas/os falta de claridad en torno a la diferencia entre la distribución 70/30 y las clases híbridas. Esto es, una parte de las respuestas asumieron que la distribución 70/30 era lo mismo que las clases híbridas, por lo que explicaron que no adoptaron la modalidad porque el número de estudiantes no superaba el aforo de las aulas.
El escenario descrito da cuenta de concepciones diversas sobre la enseñanza en clases híbridas, dando cuenta de la necesidad de proveer mayor esclarecimiento en torno a su conceptualización y su puesta en marcha. Este aspecto torna relevante la formulación de instancias de formación para enriquecer los saberes adquiridos desde la experiencia, y ofrecer nuevos conocimientos para el diseño y desarrollo de clases en donde se gestionan grupos de estudiantes en modalidades diferentes.
Objetivo:
Fortalecer en las y los docentes el diseño e implementación de clases híbridas.